Visita al musical "Evil Dead"

 El jueves 1 de Noviembre, celebrando Halloween, fui a ver el musical "Evil Dead", representado en la sala 18 de Kinépolis.

Nunca había estado en una actuación teatral que se representase en una sala de cine, antes de ir pensé que no me iba a gustar la escenografía, pero tras la obra me dí cuenta de que era lo que menos importaba. En la entrada a la sala me sorprendió que vendían chubasqueros y el que nos partió la entrada para entrar dijo: "asi que la fila 3 eh!? Os van a llegar hasta las tripas de los personajes". Nos asustamos y compramos chubasqueros, gran idea por cierto.

Nada más entrar en la sala lo primero que se ve es el equipo de música, hay una batería, guitarras y la mesa de mezclas, al lado, donde está la pantalla de cine está colocado el escenario. Es una estructura que encaja perfectamente con las dimensiones de las sala, tiene montando el trust para los focos y el escenario está elevado para que se desarrolle parte de la acción y sea visible para todo el público.

Toda la historia se desarrolla principalmente en una sola ubicación y en ocasiones salían los personajes al bosque o se encontraban en un aeropuerto y una tienda, para ésto se apoyaban en la proyección en la pantalla de un decorado que se veía por encima del instalado. También tienen paños para tapar el escenario principal cuando la acción no se desarrolla en la casa.

La historia que nos narran está basada en las películas de "Evil Dead" o "Posesión Infernal" en español. El argumento es igual aunque con ligeras modificaciones ya que mezclan las tres películas de la saga ("Terroríficamente muertos" y "El Ejército de las Tinieblas". Es una historia de terror pero contada de forma cómica, es muy divertida y el humor está presente en todo momento.

Los actores que estaban el día que fui me gustaron mucho, cantaban muy bien y te mantenían dentro del musical sin dejarte tiempo para aburrirte. 

Además de la historia, la escenografía, los actores y las canciones uno de los mayores atractivos y ganchos para ir a verlo es el momento "splatter". 

Las primeras butacas hasta la fila quinta están completamente forradas con bolsas de basura, ya que llegados a un momento de la trama los personajes asaltan al público llenándolos de sangre y del escenario salen aspersores para empapar a todo aquel que esté en esas filas. Es un momento de pringue y risas al ver que al único espectador que no llevaba chubasquero le rociaron con un fumigador y acabó totalmente ensangrentado.

En resumen, es un espectáculo muy divertido y quería compartir mi opinión y las fotos que nos hicimos con toda la sangre que nos salpicaron. 

Hasta pronto.